(1998-2008)
Prólogo
Ni que decir tiene que tenemos unas fiestas únicas y excepcionales, es por ello que la celebración de los días grandes en Villena se convierte cada año en un auténtico espectáculo que sorprende a propios y extraños y sabemos que los ingredientes para que esto suceda y sea así son muchos y todos los que nos sentimos ligados a las fiestas los conocemos. Ingredientes que los preparamos con mucho cariño y esmero y no sólo durante los días del 4 al 9 de septiembre sino también a lo largo de todo un año. El esfuerzo es mucho, el trabajo es concienzudo, la dedicación esmerada, la ilusión enorme y los resultados cada vez más visibles y palpables.
Si hablamos de fiestas, podemos mencionar los desfiles, la multitud de actos, las Comparsas, los trajes, las Escuadras Especiales, las verbenas, las Presentaciones, la devoción a nuestra Morenica, los cargos festeros, los socios y socias, la Concejalía de Fiestas, el abnegado público, los cabos, los arcos y las tribunas, las esforzadas Directivas, la Junta Central de Fiestas, los Embajadores, las carrozas, los arcabuceros, las modistas y bordadoras, la música… pero también podemos hablar de mucho más. Y es que nuestras fiestas son esto y miles de aspectos. En particular, la Comparsa de Moros Nuevos se ha visto inmersa desde casi el principio de su existencia (recordemos que por tradición oral nos situamos en el año 1854 para su fundación) en eventos que van más allá de lo estrictamente festero. Prueba de ello es el acto de la Comida a los Ancianos del Asilo que se remonta, posiblemente, a finales del siglo XIX. La generosidad y altruismo para Villena y los villeneros en general es evidente en todas y cada una de las Comparsas de nuestra localidad, por ejemplo, en La Ofrenda del Día 7, mañana en la distintas Asociaciones se ven fuertemente respaldadas desde hace muchos años. Digno es de mencionar que desde mediados de los años 50 existe este acto. Dadivosidad que va más allá, como decía, de lo festivo y que desemboca también, como no podía ser menos en las fiestas de Moros y Cristianos, en el aspecto cultural. Aquí es cuando aparece con letras mayúsculas y ribeteado en plata el Concurso de Pintura Festera que desde 1998 la Comparsa del raso de oro llevamos a cabo no con poco esfuerzo pero siempre con una ilusión desbordante. Un certamen que diez años después de que viera la luz se encuentra en un excelente estado de salud y en un momento pletórico. Concurso que, afortunadamente, no es el único de sus características dentro de nuestro ámbito festero pues el Premio de Ensayo e Investigación “Faustino Alonso Gotor”, que promueve la Comparsa de Estudiantes y que este año celebra su VI edición, se suma de una manera flamante a esta maravillosa combinación de cultura y fiestas. De la misma manera he de mencionar el Premio de Investigación “Alfredo Rojas Navarro” y el Premio Literario “Charraícas del Paseo” que otorga la Junta Central de Fiestas y que son otro genial ejemplo de lo que hablo.
Nuestras fiestas no se deben ni pueden limitarse a unos cuantos días de septiembre y a cuanto en ellos sentimos y vivimos. En las fiestas de Moros y Cristianos caben variados y asombrosos aspectos que debemos explorar y explotar. El concurso de Pintura Festera y Fiestas Populares que organiza la Comparsa de Moros Nuevos es un claro ejemplo de ello, vamos a comprobarlo.
El concurso
Como es lógico, para que un proyecto vea la luz ha de tener un inicio desencadenante, un motivo y la determinación y las ganas de llevarlo a cabo. El proyecto del concurso de Pintura Festera se inició en el año 1998 debido a que ese mismo año se construyó lo que en la actualidad es la Sede Social de la Comparsa. Una Casa que se edificó durante el primer año de Presidencia de D. Antonio Velasco Navarro cuando entonces era una necesidad imperiosa. Ahora es un referente para todos los socios y socias de la que estamos muy satisfechos por su ubicación, su amplitud, sus características, sus prestaciones y porque es un nexo de unión entre todos los Moros Nuevos, y los amigos de los Moros Nuevos, durante los días de fiestas y también a lo largo de todo el año. De manera cronológica a como iban levantándose las paredes, fue naciendo una inquietud en la Junta Directiva de Antonio liderada por su vicepresidente D. Pedro Albuixech Hernández que se concretaba en dos cuestiones: una objetiva y de orden práctico y la otra con un carácter más subjetivista y de tendencia marcadamente artística.
La primera se cimentaba en cómo decorar las paredes de la nueva Sede Social cuando las arcas de la Comparsa habían quedado bastante exiguas, como es de suponer, con la construcción y la otra en que dicha decoración, a ser posible, resultara acorde tanto con la idiosincrasia de la Comparsa como de la nueva Sede Social.
Una vez centrado el tema, no tardaron en darse cuenta de que las dos posturas lejos de anteponerse eran perfectamente compatibles y complementarias, y que, independientemente de las necesidades que le pudieran ir surgiendo a la Comparsa y de las adquisiciones que se fueran considerando oportunas, se podría convocar un concurso de Pintura que permitiera decorar la Sede con obras cualificadas y gozar, en el transcurso del tiempo, como así está sucediendo, de una pinacoteca afamada que le diera una cierta categoría, en este sentido, a nuestra Comparsa. Además, con la convocatoria del concurso se conseguía, al ser patrocinado total o parcialmente -como así ha ido sucediendo-, abaratar los costes que supondría una compra directa al artista y adquirir, año tras año, la pintura que, a juicio de los expertos, el jurado nombrado para fallar el certamen, resultara más relevante. Lógicamente a ningún componente de esa Junta Directiva se le escapaba que el ahorro económico tendría que ser suplido con el trabajo, el esfuerzo y la dedicación que el mismo requería. Pero esto, como sucede con quienes se embarcan en la aventura de estar al servicio de sus colores, lejos de amedrentar, les dio fuerzas y ese mismo año el resultado ya fue perfectamente visible.
La Sala de Exposiciones de nuestra Casa se ha visto desde 1998 perfectamente engalanada con obras de mucha calidad y de variada procedencia. El objetivo de realizar un concurso aceptable y dentro de nuestras posibilidades, de forma que poco a poco fuera cogiendo solera en el ámbito cultural de pintura, se empezó a cimentar. Como tema: el de Fiestas, y no exclusivamente de Moros y Cristianos.
Nueve ediciones
Éste, afortunadamente, es un certamen con un cierto arraigo y por tanto no todas sus ediciones han sido cortadas con el mismo patrón. El concurso se ha ido adaptando a los tiempos y ha ido evolucionando según la Comparsa y sus organizadores mejor han considerado en cada momento. Un claro ejemplo de esto es la fecha en la que se ha enmarcado. En las cuatro primeras ediciones fue el mes de agosto el elegido para el fallo y la posterior exposición de los cuadros; en la quinta edición se adelantó un poco, a principios de junio, para que el periodo vacacional no fuera un obstáculo y a partir de la sexta ha sido en febrero cuando la incógnita de saber el ganador se ha dilucidado. Lógico es que, en un principio, se ubicara en los prolegómenos de nuestras fiestas y que sirviera de pistoletazo de salida para la apertura de nuestra Casa de cara a los días grandes de septiembre. El mes de febrero es idóneo, mucho más propicio y sirve para “abrir boca” en la antesala del “Ecuador”.
Esta variante en el calendario ha modificado, evidentemente, la exposición con todas las obras presentadas que desde el principio ha tenido lugar, y hay que decirlo, con bastante éxito. Los primeros años abarcó desde su inauguración a principios de agosto hasta finales del mismo y en los últimos años se ha prolongado hasta traspasar el medio año festero en por lo menos una semana.
En 1998 se acordó la conveniencia de ser dos los premios que se otorgaran, como así sucedió, pero a partir del año siguiente un único premio pasó a engrosar las vitrinas, en este caso las paredes de nuestra exposición. Este acuerdo permaneció hasta el año 2006 en el que de nuevo dos fueron los premios entregados, como ha venido sucediendo hasta este mismo año. Por tanto recapitulamos: de las nueve ediciones organizadas en cuatro han habido dos premios (1998, 2006, 2007 y 2008) y en cinco un premio único (1999, 2002, 2003, 2004 y 2005). En total, trece cuadros que se han visto favorecidos del beneplácito del Jurado. Cabe destacar que durante los años 2000 y 2001 no se realizó el concurso, es por ello que son nueve las ediciones a pesar de que la primera aconteciera, como hemos visto, en 1998.
Es en el año 2005 cuando es inaugurado el VI Concurso de Pintura Festera y Fiestas Populares, nombre con el que definitivamente es bautizado y conocido en la actualidad. La coletilla “y Fiestas Populares” se hace necesaria ante un evento de tales características que tiende a expansionarse y que tiene y que debe abarcar no sólo al ámbito festero de los Moros y Cristianos sino también a todas y cada una de las fiestas populares de nuestro extenso territorio. La diversidad en cuanto a la procedencia de los autores y nuestra vasta diversidad festiva-cultural nacional obliga a hacer crecer y a dar un paso adelante al concurso.
Los ganadores
Muestra de la diversidad de poblaciones que se han dado cita a lo largo de estos años en nuestra Sede Social, a través de los autores que se han presentado, son los nombres de las siguientes localidades que se vieron representadas en la Primera Edición: Villena, Alcoy, Alicante, Bocairente, Albaida, Mislata, Benidorm, Biar y Sax. Así como en la Segunda Edición: Villena, Cartagena, Alcoy, Bocairente, Alicante y Fontanares o en la Tercera, de 2002: Villena, Castalla, Cocentaina, Alcoy, Quart de Poblet, Muro de Alcoy, Madrid, Alicante y Biar. Procedentes de lugares tan diversos como Manresa, Yecla, Elda, Crevillente, Buñol, Alicante, Mediana, Segovia o Cocentaina han sido las obras presentadas en este mismo año. A lo largo de las nueve ediciones muchos han sido y estamos seguros que serán los rincones de España que van a tener su hueco en nuestra Sala de Exposiciones para expresar, a través de los pinceles, las grandes manifestaciones que los pintores son capaces de crear.
En la lista de ganadores se repite algún que otro nombre, una vez un artista se ha alzado con el Primer Premio en dos ocasiones: Isidro Gosálbez Ríos; otra vez además de dos Primeros Premios también un Segundo: Francisco García Beneyto y otro ha conseguido un Segundo y un Primero: Fernando Galarza Navarro. Esta es la lista de los laureados, algunos de Villena y otros de Biar, Zaragoza, Yecla o Buñol:
- Año 1998 Primer Premio: Antonio Satorres Sarrió, “Sarri”, de Villena. Segundo Premio: Ginés Conca Berenguer, de Biar.
- Año 1999 Primer premio: Isidro Gosálbez Ríos, de Villena. Título: “Ya vienen, esto no hay quien lo pare”
- Año 2002 Primer Premio: Isidro Gosálbez Ríos, de Villena. Título: “Las 12 del día 7 y sin vender una escoba”
- Año 2003 Primer Premio: Francisco García Beneyto, de Villena. Título: “Vendedor Ambulante”
- Año 2004 Primer Premio: Virtudes Espinosa Carrión, de Villena. Título: “Villeneros”
- Año 2005 Primer Premio: Cuca Muro Grilló, de Zaragoza. Título: “Noche de San Juan”
- Año 2006 Primer Premio: Francisco García Beneyto, de Villena. Título: “Danza” Segundo Premio: Andrés Vidal Título: “Llegó la Mahoma”
- Año 2007 Primer Premio: Francisco Carpena Muñoz, de Yecla. Título: “A la grupa” Segundo Premio: Fernando Galarza Navarro, de Buñol. Título: Sin título
- Año 2008 Primer Premio: Fernando Galarza Navarro, de Buñol. Título: “La Tomatina” Segundo Premio: Francisco García Beneyto, de Villena. Título: “Encierro”
En el año 1999, primer año en el que se dio un Premio único, se acordó concederle una mención especial a una de las obras presentadas debido a su originalidad. Se trató del artista local Francisco Martínez Catalán y su pintura se titula “Clonación”. Este hecho sólo ha ocurrido una vez y tiene por ello cierta relevancia.
Los premios
Cabe decir siempre en estos casos que el verdadero premio es el reconocimiento a la labor realizada y conseguir que un trabajo, el cual has elaborado entregando una parte de ti, sea valorado, expuesto y difundido. Pero también es obvio decir que si todo esto es con una recompensación económica, tanto mejor.
En el año 1998 hablábamos todavía en pesetas, 200.000 (1.202,02 Euros) fueron para el Primer Premio y 100.000 (601,01 Euros) para el Segundo y el año siguiente, al concederse un único Premio, la cuantía de éste ascendió a 300.000 pesetas (1.803,04 Euros).
Comenzó la segunda etapa (podemos llamar así a las ediciones a partir de 2002) del certamen con 1.800 Euros y un premio único, como sabemos, hasta que esta cantidad ascendió a 2.000 Euros en el año 2005 para crecer de manera notoria en el 2006. Este año el Primer Premio se dotó con 2.400 Euros y el Segundo con 1.200 Euros. En el 2007 se incrementaron en 100 Euros la cantidad de ambos galardones quedando el Primero en 2.500 Euros y el Segundo en 1.300 Euros.
Otra prueba de la buena salud por la que pasa el concurso de Pintura Festera y Fiestas Populares que la Comparsa de Moros Nuevos llevamos a cabo es que los premios en los últimos años han tenido una marcada nota ascendente. Y así ha sido este año en la última edición volviéndose a incrementar los Premios en 100 Euros más. El Primer Premio tuvo una dotación de 2.600 Euros y el Segundo de 1.400 Euros, es decir, un total de 4.000 Euros entregados a quienes tienen la gentileza, deferencia y maestría, en cuanto a técnicas pictóricas se refiere, de enviar sus preciados trabajos, desde cualquier punto cardinal como hemos mencionado, a nuestra Sede Social.
El jurado
Sobre un jurado integrado por especialistas y personalidades del mundo de la cultura, designado por la comparsa de Moros Nuevos, ha recaído la responsabilidad a lo largo de todos estos años de emitir un veredicto lo más justo y ecuánime posible. Cabe destacar que los miembros de éste no han sido para nada siempre villeneros sino que ha habido en este sentido una gran diversidad, y que nunca a ningún miembro de este tribunal se le han marcado los directrices para su valoración para que esta siempre sea lo más objetiva y personal posible.
“Como muestra vale un botón”. Por ello, figura aquí la composición de los dos primeros jurados del concurso. El primer jurado de 1998 estuvo formado por los siguientes artistas: Vicente Esparza Barceló, Francisco García Beneyto, Pedro Marco Hernández, Francisco Flor Hernández y Pedro Albuixech Hernández. En representación de la Junta Directiva Antonio Velasco Navarro, en su calidad de Presidente. En 1999 fueron Francisco Barrachina Barrachina, Francisco Calabuig Gisbert y Francisco García Beneyto. Como representante de la Junta Directiva, de nuevo, su Presidente.
(FOTOS Nº 11 y Nº 12)
Las bases del Concurso
Es necesario insistir en el aspecto de que éste es un concurso abierto y que en él tienen cabida artistas de cualquier punto de nuestra geografía y expresiones tanto de pintura festera como de fiestas populares. Al ser la Revista “Día 4 que fuera” un gran escaparate que lleva el nombre de Villena por toda nuestra ciudad, comarca y mucho más allá, es una buena ocasión que aquí figuren las últimas bases, las del año 2008, de este certamen para que sea todavía más conocido, si cabe, y para que vaya derribando fronteras y desconocimientos. Teniendo constancia de estas bases se pueden intuir las venideras en cuanto a fechas aproximadas y en cuanto a puntos concretos.
Bases del IX Concurso de Pintura Festera y Fiestas Populares
Primera: Se convoca el IX CONCURSO DE PINTURA FESTERA Y FIESTA POPULARES “MOROS NUEVOS”, dotado de dos premios:
Primero 2.600 Euros
Segundo 1.400 Euros (Los premios pueden variar cada año)
Segunda: Podrán concurrir a este concurso todos los nacidos o residentes en España.
Tercera: Las obras presentadas tendrán que ser originales y referidas a temas de pintura festera, u otra fiesta popular.
Cuarta: Cada autor podrá presentar una sola obra, fechada en los años 2007 ó 2008, que no haya sido premiada en ningún otro concurso, hasta el día 15 de febrero de 2008. (Estas fechas varían cada año)
Quinta: Los obras tendrán una medida mínima de 80 x 61 cm., y deberán presentarse enmarcadas con un listón cuya anchura no será superior a 4 cm.
Sexta: Podrá emplearse para la realización de la obra cualquier técnica pictórica, excepto ordenador.
Séptima: Las obras se entregarán sin firmar, pegando en la parte posterior, el boletín nº1. En sobre aparte irá el boletín nº2, junto con una fotocopia del DNI. (Se refiere a unos boletines que van anexos a unos trípticos que se realizan meses antes del fallo del concurso en los que se debe rellenar el nombre y apellidos, teléfono, población, C.P., provincia, título de la obra, si la obra no resulta premiada y se desea venderla la cantidad solicitada por ella y si la devolución de la obra se hará por agencia o será por el autor)
Octava: Las obras y documentación referidas serán enviadas con embalajes que reúnan las condiciones necesarias de seguridad, a portes pagados o entregadas personalmente en la Sede Social de la Comparsa de Moros Nuevos, C/ Teniente Hernández Menor nº 16, hasta el día 15 de febrero de 2008 hasta las 22,00 h. (Esta fecha varía cada año)
Novena: El jurado realizará una selección previa. Con las obras seleccionadas se realizará una exposición en la Sala de Exposiciones de la Sede Social de la Comparsa, del 22 de febrero al 16 de marzo. Los premios se harán públicos el mismo día 22 de febrero de 2008, con motivo de la inauguración de la exposición. (Estas fechas varían cada año)
Décima: El jurado estará integrado por especialistas del ámbito cultural, designado por la Comparsa de moros Nuevos, cuya identidad no se dará a conocer hasta la designación de los premios.
Este jurado estará facultado para declarar desierto alguno de los premios, pero en ningún caso podrá dividirlo en su importe.
Undécima: Las obras premiadas quedarán en propiedad de la Comparsa, que adquirirá los derechos de edición y reproducción de ellas.
Duodécima: Del 17 de marzo al 25 de abril, los autores de las obras no premiadas, podrán retirarlas en la Sede Social los martes a partir de las 22 h. o cualquier día contactando por teléfono. Las obras no retiradas pasarán a ser propiedad de la comparsa de Moros Nuevos.
Teléfono: 965813554 - Sede Social
info@morosnuevos.com
www.morosnuevos.com
El futuro del concurso. Epílogo
El pasado 22 de febrero se produjo la última lectura del acta con la resolución del jurado.
En ella resultó ganadora la obra titulada “La tomatina” del artista de Buñol Fernando Galarza Navarro, una obra que juega con los tonos del color rojo magistralmente y en la que los detalles físicos y gestuales de quienes están representados en el cuadro son asombrosos. La pintura “Encierro” de Francisco García Beneyto se alzó con el Segundo Premio, un cuadro en el que están retratadas las fiestas de San Fermín de una soberbia y elegante manera. Sus trabajos fueron los elegidos entre 17 obras finalistas tras una selección de 23 presentadas. Un número muy aceptable y que sigue la línea de ediciones pasadas, ya que sobre una veintena de obras son las que normalmente se presentan. En 1998 fue el número record con 33 obras aunque en 2003 y 2006 no se superó la decena y decena y media de pinturas, no siendo ésta, como digo, la norma habitual. Esta más que notoria aceptación entre los artistas es un aliento para la Comparsa ya que vemos que este es un excelente síntoma de continuidad.
El Presidente de la Comparsa, D. José Hernández Sánchez, en dicha inauguración del pasado febrero, hizo un breve repaso de la historia del certamen, confirmó la buena salud y proyección del mismo y agradeció, como no podía ser de otra manera, la colaboración prestada por el M.I. Ayuntamiento de Villena (Concejalía de Cultura), Caja Murcia y la empresa Edificios y Estructuras de Hormigón (EEH), patrocinadoras del concurso. Empresas sin las cuales no sería posible la realización de un evento de estas características. A lo largo de esta decena de años, otras empresas han sido quienes han aportado, además de su imagen y dinero, también ilusión por un gran proyecto compartido con el esfuerzo y el trabajo que las Juntas Directivas de los Moros Nuevos han derrochado.
No cabe duda, llegará el 2009 y la X Edición del concurso de Pintura Festera y Fiestas Populares brillará de nuevo porque este certamen, que ya está más que consolidado, tiene fuerza y expectativa para largo. Diez ediciones se cumplirán y la razón por la que nació el concurso está más que cumpliéndose, conseguir una admirable pinacoteca de un valor incalculable y de cierto renombre y decorar las paredes de nuestra Sede Social vistosa y elegantemente. En la mente de la organización del concurso se le da vueltas a la creación, de cara a este Aniversario, de un catálogo con todas y cada una de las obras que se han visto laureadas con algún premio en nuestro certamen. Éste será un nuevo aliciente para los artistas ya que sus obras además de reconocidas, galardonadas y expuestas estarán impresas y catalogadas. Seguro que es un proyecto pronto realizado.
¡Qué suerte que tenemos con nuestras queridas fiestas de Moros y Cristianos! Reincido con la que decía al principio de este artículo, además de ser únicas y excepcionales y de abarcar grandes actos, desfiles, religión, música, etc. se expanden en muchas más variantes y en muchos más campos y aspectos. Un claro ejemplo es este Concurso que lo único que ha pretendido y pretende es hacerlas un poco más grandes y todavía mejores.
Amado-Juan Martínez Tomás
Bibliografía: Libro del 150 Aniversario de los Moros Nuevos.
Programas internos de la Comparsa de los años: 1999, 2002, 2003, 2004, 2005, 2006 y 2007.
Agradecimientos: A D. Pedro Albuixech Hernández y a D. José Ignacio Rodes Alcaraz.